Cada 3 de febrero se festeja el Día Internacional del Abogado en reconocimiento a todas aquellas personas que ejercen esta profesión, una de las más antiguas en todo el mundo, ya que desde tiempos remotos, estos hombres y mujeres nos han defendido.
En México se celebra a los abogados el 12 de julio para honrar la primera cátedra para la enseñanza del Derecho que se realizó en la Real Pontificia Universidad de México; y se estima que hay alrededor de 442 mil abogados. Conozcamos un poco sobre la historia de esta profesión.
El origen de la abogacía se remonta a la Antigua Grecia, en donde surgieron los primeros oradores, quienes se reunían en las plazas públicas para organizar diálogos o debates referentes a la política y la sociedad; sin embargo, estas pláticas no estaban permitidas, ya que la Ley Antigua decía que los ciudadanos no podían opinar acerca de temas que eran decisión de los reyes, por lo que estos eruditos fueron castigados por sus acciones. Con el paso de los años estas prácticas evolucionaron y se adaptaron a las sociedades, las creencias y las ideologías que iban surgiendo.
Con la llegada del cristianismo, ninguna persona católica podría adoptar estas prácticas o estar relacionado con la abogacía; pero en la Antigua Roma con el emperador Claudio, se oficializó la abogacía como una profesión, que en aquel entonces solo los hombres podían ejercer. Fue hasta la era moderna que las mujeres pudieron ejercer también esta profesión, y algunas alcanzaron grandes logros.
La abogacía es una de las profesiones más importantes, pues desde el nacimiento del mundo civilizado, las leyes son una parte muy importante de nuestras vidas, y no hay quienes estén más familiarizados con ellas, que estas mujeres y hombres.
Mario Valadez
Fuentes: https://institutometropolitanodechiapas.edu.mx/artes-y-humanidades/dia-internacional-del-abogado/
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