Con palomitas🍿🎬 Billy Elliot 🎞️🍿Una obra casi poética de cómo los sueños pueden apagarse fácilmente si decidimos matar el fuego en nuestro interior, de cómo vale la pena quebrantar el status quo para poder ser libres...

 

 

 

Billy Elliot es una película británica de drama lanzada en el 2000, dirigida por Stephen Daldry y escrita por Stephen Hall, es una adaptación de la obra teatral y musical de este último. Cuenta con un reparto conformado por Jamie Bell, Julie Walters, Gary Lewis, Jamie Draven, Stuart Wells y Adam Cooper

 

 

La historia se sitúa en 1984, durante una huelga de mineros en el condado de Durham, en Inglaterra; Billy es el hijo menor de una familia de mineros, sin madre y viviendo solo con su abuela, padre y hermano mayor, su familia está condenada al más bajo estrato social debido a la crisis que atraviesa el país; su vida es monótona pues no hay mucho que ver en el pueblo donde vive, lo único que puede hacer es cuidar de su abuela, ir a clases y atender las lecciones de boxeo a las que forzosamente acude para complacer a su padre, sin embargo, no es el boxeo lo que le apasiona, sino el baile, el cuál comienza a practicar a escondidas de su familia. Billy Elliot nos cuenta la historia de un niño que lucha contra los prejuicios de la sociedad mientras se debate en ser lo que su familia espera o perseguir sus sueños

 

 

Realmente no me resistí en elegir esta película para traerles una reseña, y es que realmente es una joya escondida del cine. ¿Por dónde empezar? Esta película retrata a la perfección el estilo de vida de la clase baja, sus limitaciones y sus aspiraciones reprimidas por la rutina y el conformismo; vemos un hogar triste y apagado, una casa entre muchas, en un vecindario que no destaca en ningún aspecto, un lugar frío, húmedo y desesperanzador es donde Billy vive (o al menos trata) cómo los demás. Su familia vive del sueldo diario, sin lujos, aferrados a los pocos peniques que pueden ganar en la mina, resignados a ese estilo de supervivencia, pues no puede llamarse vida. 

 

 

Muchas personas no se deciden en ver este tipo de películas debido a su origen musical, sin embargo, no se trata de una historia arbitraria donde el poder del canto y el baila dotan superficialmente la trama de amor y esperanza, llenando de felicidad sin sentido a los personajes (no crean que es una crítica directa a los musicales, realmente hay muchos musicales buenos, vean Chicago, West Side Story, Sweeney Todd, Les Miserables, etc; así que no comiencen a juzgarme), más bien retrata al baile cómo una necesidad, como una fuente de energía, como un hambre voraz de la cuál desconocía, es una cura para el rudo destino de Billy, es el reflejo de ese grito desesperado por huir de una vida condenada a la miseria y la rutina, algo que despertó en Billy sus ansias de comerse al mundo, de ser el mismo

 

 

No hay palabras que describan lo maravillosa que es esta película, y repito: no es un musical convencional, no cantan, pero las actuaciones y la forma en la que se desenvuelven los personajes (no solamente a través del baile pero sí, el tipo de baile es fundamental en este largometraje) nos dan la certeza de que todo tiene un porqué, todo elemento es una adición a la narrativa; partiendo del tipo de música que forma parte del soundtrack: T. Rex, The Jam y The Clash, son grandes bandas de rock muy acorde a la época y cuyas canciones encuadran perfectamente esa sensación de rebeldía en nuestro personaje principal

 

 

No olvidemos la razón de existir de nuestros personajes: Billy, obviamente la estrella, su sentir y su pasión desbordan la pantalla, sin mencionar su talento para el baile, mostrando fuerza y resistencia dignos de un atleta; pero me gustaría hablar de los demás personajes, cómo su padre y su hermano, Tony, ambos son símbolos de la masculinidad forzada en ese tiempo, son ejemplo del hombre que no debe llorar ni sentir frente a los demás, que debe trabajar duro y tragarse su dolor (y a pesar de representar todo esto, no son villanos, ojo con juzgarlos cómo tal), no es hasta que Billy rompe con ese ciclo autodestructivo es que ambos se quiebran replanteando lo que están haciendo con su vida, descubriendo que el amor que se tienen es más grande que los prejuicios que los rodean. 

 

 

Billy Elliot es un film con una paleta de colores sobrios y fríos, la calidez es traída por los momentos de pasión y explosividad, aquellos puntos de choque y expresión que nos lleva a entender los motivos, miedos y deseos de nuestros personajes. Billy Elliot, una obra casi poética de cómo los sueños pueden apagarse fácilmente si decidimos matar el fuego en nuestro interior, de cómo vale la pena quebrantar el status quo para poder ser libres.  

 

 

 

Daniela Ramírez López

 

Fuente:

logo

TEMAS RELACIONADOS


PortadaNoticiasTVEn Vivo